CREACIÓN DRAMÁTICA: PERSONAJES
- universalteatro1
- 20 feb
- 23 Min. de lectura
Actualizado: 23 jun
LOS PERSONAJES
Las primeras premisas para crear los personajes y acercalos de algún modo a mi propuesta como creador escénico fue la de encontrar el por qué de la existencia de ellos. Así, me di cuenta que cada personaje es un mundo dentro de un mismo universo, que es Somos polvo de estrellas.
Tras meses de reflexión, decidí qué aspecto quería que tuviera el personaje con lo que yo como artista, creador y actor pudiera sentirme identificado a ese ser ficticio.
PERSONAJE | IDENTIFICACIÓN |
Rosa Liah | Su pasión le ha hecho distanciarse de su pasado |
Rufiano | La pérdida de un ser que ama |
Máximo | Miedo a sentirse inferior al resto de su entorno. |
Federico | La incapacidad de perdonarse un acto deleznable |
Axel | El gusto personal de dedicarse a los demás. |
Zacarías | La ansiedad y el agobio por el paso del tiempo. |
Edipa | El hecho de que un gran poder pueda corromperte. |
Posteriormente, fui trabajando sobre algunos aspectos de cada personaje, creando una especie de biografía momentos antes de que su escena se empezase a representar, haciendo una especie de estudio teatral cartográfico en el que pueda contar cómo es vivir un día con el personaje. Este apartado tiene que ver con los antecedentes del personaje. De este modo, se trata de indagar en aquello que ha hecho el personaje antes de la escena que está a punto de representar.
PERSONAJE | BIOGRAFÍA |
Rosa Liah | A la 13:00h del mediodía la alarma del iPhone le despierta. Lleva puesto un antifaz y los tapones de oídos no le ocultan el ruido de la alarma. Bosteza y da vueltas en la cama hasta que decide apagarla. Se viste con una bata de seda roja y va al baño donde se desmaquilla algunos restos de máscara de pestañas que no consiguió quitarse ayer por la noche.
Tras desmaquillarse se mira al espejo y observa su piel. Se da varias cremas hidratantes con ácido hialurónico y colágeno para prevenir el envejecimiento de la piel. Vuelve a coger su iPhone y se pone la canción de Los chichos del coro en versión techno para acabar de despertarse, mientras baila al ritmo de la música. (https://www.youtube.com/watch?v=Ie2Y2O6aUWs).
Se prepara un plato de salmón a la plancha acompañado de dos huevos y aguacate con pan integral. Mientras come, quita la música y disfruta del paisaje de fuera. Mira por la ventana el día. De fondo se escucha el viento, y algunos ruidos de la carretera. Rosa Liah mira hacia el cielo, poniendo su vista en el Sol, que lo ocultan varias nubes grises.
Después de comer, vuelve a echarse durmiendo una siesta de 20 minutos. Cuando le vuelve a despertar la misma alarma irritante, coge un libro ya empezado, Camino a la guillotina, basado en los textos políticos de Olympe de Gouges.
Tras media hora de lectura, entra en WhattsApp, tiene varios chats sin abrir lleno de notificaciones. Entra en el chat de su padre, con el que no hace semanas que conversa. En el último mensaje él le dice: “No quiero saber nada. Ya me llamarás diciéndomelo Rosa Mariah.” Se queda un rato en el chat, y deja de contestar
Se levanta y comienza a estirar su cuerpo al ritmo de música de reggaetón. Suena la canción Picky de Joey Montana (https://www.youtube.com/watch?v=RqpKDkVzlqU). Según estira su cuerpo, acaba bailando en medio del baño imaginando que está encima de un escenario lleno de público. Rosa Liah ríe mientras sus movimientos aumentan donde predominan la actividad de sus caderas, brazos y pechos.
Tras un rato bailando, Rosa Liah se mira así misma y se descubre en el baño de su casa. Toda la imaginación se desvanece en un golpe de realidad. Rosa Liah entra a la ducha para quitarse el sudor de su cuerpo.
En el armario tiene colgado un póster en el que aparecen varios compositores de música clásica. Mientras se viste, decide poner Sueño de amor de Franz Liszt (https://www.youtube.com/watch?v=_pysf5ixCTQ). Se pone un chaleco blanco de lentejuelas. (https://www.amazon.es/inlzdz-Lentejuelas-Camiseta-Atractivo-Discoteca/dp/B07N6BK84Q). Esta vez baila de forma mucho más expresiva, sin movimientos impulsivos.
Una vez vestida se mira nuevamente al espejo, mientras la composición sigue sonando. Rosa Liah apaga las luces del baño y se tumba en la cama con el móvil entre sus manos. Entra en Tinder, en una conversación con un tal Jaime, un poco mayor que ella, pero que se conserva estupendamente.
Rosa Liah con el chaleco puesto se imagina a Jaime en su habitación. Con una mano agarra el móvil viendo una foto de él en la que sale en un espejo del gimnasio. Le atrae la foto por el contraste de su cuerpo, piel blanca con unos tirantes negros en los que destacan su pelo cano y las venas gruesas de sus antebrazos. Rosa gime mientras sube el volumen del móvil para no escucharse a sí misma. Después de esta masturbación, escribe a Jaime y le envía la dirección de su casa. Le pide a éste que mañana al mediodía vaya a visitarle.
Rosa Liah se prepara un batido natural de dos huevos, plátano, leche, avena y nueces tostadas con un chorro de miel. En la mesa encuentra una paleta de colores en crema de maquillaje. Su compañero de piso, Máximo, ha debido dejárselos después de haber hecho un espectáculo en alguna fiesta de cumpleaños.
Rosa Liah se toma el batido con gusto, volviendo a leer otro poco de su libro con un subrayador en la mano, tomando notas. Tras un rato leyendo vuelve al armario y coge un abrigo de invierno junto con una bolsa llena de juguetes y objetos excéntricos como boas y puros.
Al sacar el abrigo tira una caja de color morado que tiene polvo en su exterior. Rosa Liah se agacha con cuidado a recogerla y abre lo que hay dentro. En ella hay varias composiciones musicales, así como retratos y juguetes de la infancia. En las fotos aparece ella de pequeña junto a su madre y su padre. Aunque en la mayoría predomina la ausencia de su madre. Sin embargo, Rosa Liah en las fotos con su padre conserva una sonrisa que hace años que no vuelve a tener. Rosa Liah mira la hora y guarda la caja dentro de su armario. No sin antes haber cogido una pelota saltarina roja de dentro.
Rosa Liah se guarda la pelota en su bolso y sale de casa con un paraguas, tapándose de la lluvia. Entra en el metro y coge la línea 6, tiene un trayecto de 40 minutos. Aprovecha el tiempo para seguir hablando con Jaime, éste le ha respondido que sí, a su plan de verse en su casa. Rosa Liah le vuelve a escribir diciéndole que no puede aguantarse las ganas de verlo y le envía la ubicación del lugar en el que ella pone copas.
Rosa Liah se para en un Mac Donalds a comer una hamburguesa de crispy bacon con doble de kétchup. Tras engullir la hamburguesa, llega al Bar CopaCabana donde se queda hablando con el portero de la discoteca. Ambos hablan sobre cómo llevan la semana. Antes de entrar Rosa Liah le pide el favor de que en caso de que llegara Jaime, le dejara entrar sin necesidad de hacer la cola que es un conocido suyo al que quería ver. El portero le dice que sí con la cabeza.
Rosa Liah entra en el disco-bar donde la música está puesta a volumen bajo. Los técnicos están probando el nuevo escenario que se ha hecho para las gogós del club. Rosa Liah camina medio desorientada, conoce el lugar, pero nunca se acostumbra a la apertura del espacio donde no hay personas empujando y sudando.
Cuando se pone en la barra aparece el jefe del recinto y la lleva a su despacho. Allí le cuenta la baja que han tenido de bailarinas y le ofrece el puesto de ser telonera del nuevo escenario del bar. Le pide que improvisé un show de al menos media hora con canciones que le gusten.
Rosa Liah, eufórica, le agradece la oportunidad que llevaba esperando desde hace años. Era la primera vez en la vida de Rosa Liah que iba a cobrar profesionalmente por un número de baile. Ella sabía que esto no le haría mucha gracia a las demás bailarinas (Azucena, Iris, Violeta, Margarita, Jazmín y Camelia) las cuales la sentirían como una nueva amenaza.
El jefe del recinto le promete que si el show sale como lo esperado, se planteará la idea de darle un show propio como a las demás bailarinas del disco-bar. Cuando Rosa Liah sale del despacho, se encuentra a la mayoría en la barra, algunas fuman, otras beben y otras la miran reticentes.
Cuando el jefe sale del despacho saluda a las bailarinas y les habla sobre la posible incorporación de Rosa Liah. Éstas falsamente le dan la enhorabuena, mientras amenazan con la mirada a Rosa Liah, quien tampoco se deja importunar por ellas, aunque sí siente angustia ante la falta de compañerismo y empatía hacia ella.
Son las 22:00h de la noche, el recinto abre sus puertas y Rosa Liah ha terminado de decirle al sonidista la selección final de todas las canciones que saldrán en su show y le pide que respete el orden en todo momento. Dato en el que hace hincapié. El show tendrá un total de 7 canciones que Rosa Liah bailará e interpretará para demostrar su personalidad artística. Las demás bailarinas se sientan cerca del escenario, increpando a Rosa Liah. La música suena y Rosa Liah sale a escena desde una basura a modo performático. |
PERSONAJE | BIOGRAFÍA |
Rufián | A las 6:00h de la mañana se despierta y lo primero que hace es acariciar a su gato Rufiano. Le cambia la arenilla y le ofrece un par de sardinas y leche para comer. Después de comer un desayuno a base de pan untado en leche va a ver a las ovejas y las vacas.
Una vez ha desayunado y ha pasado tiempo con Rufiano, va hasta el establo a de dar de comer al resto de su rebaño. Después aprovecha para observar la naturaleza y si hace bueno se tumba en la hierba a descansar. El olor a estiércol y a campo mojado son dos de las sensaciones que más le gusta de su vida en el campo.
Luego, empaqueta todos los productos que va a vender a los comerciantes del pueblo. A aquellos que no soporta, que son realmente la mayoría, les da los productos más añejos y en algunos incluso escupe de forma disimulada. Los deja listos al lado de la puerta con un papel en el que pone el precio que tienen que pagar, evitando así cualquier tipo de interacción con ellos.
Luego va al salón y como de costumbre aprovecha un rato para jugar con su gato, siempre lo trata de entretener con diferentes juguetes de lana de sus propias ovejas hechas a mano. Aunque su juguete favorito es un pez de goma que hace ruido cada vez que lo aprieta. En esos ratos Rufián conversa con Rufiano. Rufián le habla con total naturalidad a su gato, como si éste fuera capaz de entenderlo.
Después prepara un cazo de pisto con verduras y hortalizas de su propia huerta. A la par que se hace unos cuantos huevos que unta con pan. Después de comer, aprovecha para poner la televisión y criticar a la gente que aparece en ella con Rufiano. Rufián evita ver mucho la televisión porque le provoca dolor de cabeza.
Tras una siesta en el sofá, unos ruidos del exterior le despiertan, son unos jóvenes que están de botellón cerca de su casa. Rufián sale con un hacha amenazante y amenaza a cada joven que dicen estar de fiesta por las fiestas del pueblo. Rufián acaba entrando en cólera y corre tras ellos con el hacha. Rufiano más rápido, consigue arañar a alguno de ellos. Los jóvenes juran lamentarse y a su vez vengarse de él.
Ambos vuelven a casa y comienza a llover, cosa que hace feliz a Rufián. Rufián se hace una taza de chocolate caliente y decide ponerse La matanza de Texas con la que disfruta. Aunque a los cuarenta minutos la quita porque le molesta a su visión.
Después cena una cuajada y varias galletas y llama a Rufiano para acostarse con él. Rufián se pone su típico pijama de rayas azules y se echa a dormir junto a su gato. Unos cohetes artificiales a lo lejos le despiertan y decide bajar la persiana para evitar los ruidos de fuera.
Rufián se queda completamente dormido en la cama, con una respiración fuerte que se turna con varios ronquidos. En la cama no hay ningún gato, Rufiano no está por ningún lado. |
PERSONAJE | BIOGRAFÍA |
Máximo | Máximo se levanta de la cama y mira un papel con el que ha dormido. Es una carta de despido, así su último trabajo se convierte en el trigésimo del año que pierde. Se dedica a hacer reír al resto, al menos, eso intenta. Todos sus espectáculos siempre acaban terminando mal.
Cuando dan las 12 de la mañana, se levanta y se quita los restos de la base blanca que llevaba. Pisa un globo de cumpleaños que estaba por el suelo del baño y suena un estallido que apenas le inmuta.
Pronto comienza a notar vibraciones en el estómago, se sienta en la taza del váter y comienza a soltar una cagalera. Tras un rato dando pequeños chillidos de esfuerzo se levanta y al coger el papel del baño acaba manchándose su mano con nuevas heces que acababa de evacuar.
Máximo apoya la mano en la pared y se tiñe de una silueta marrón de la forma de su mano. Coge el rollo de papel y se le cae entre las manos, al recuperarlo del suelo e inclinarse acaba cayendo al suelo dando una voltereta, que hace que caiga de culo. Ahora el suelo está completamente manchado. Máximo empieza a mezclar la risa con el llanto al no poder creerse la situación que está viviendo.
Al rato decide limpiarse las manos y apuntar todo el suceso en una libreta roja donde anota sus ideas. Después consigue limpiar todo el estropicio con una fregona que estaba a punto de tirar a la basura.
Cuando se ha vestido, se prepara un vaso de Cola Cao con madalenas que las deja mojar en el vaso. Una vez ha comido todo sale de casa con un maletín rojo. Al salir a la calle se fija en un cartel que está colgado en una farola, en él se explica que hay nuevas vacantes para un nuevo espectáculo circense. Al leer bien toda la información descubre que la entrevista de trabajo es ese mismo día por la tarde.
Máximo camina por las calles y procura no chocarse con los transeúntes que van a menor velocidad de la que él camina. Su característica forma de caminar es lo que hace que las personas se giren a verlo.
Se sienta en una parada de bus y mientras espera a que llegue el transporte se entretiene mirando a un bebé que a su vez lo mira. Máximo le hace cambios de expresiones faciales, procurando hacerlo reír, pero el bebé comienza a llorar con fuerza. Las personas de la parada lo miran reticentes.
Cuando el autobús llega y todos entran, Máximo sin haberse dado cuenta de la llegada del de éste, trata de subirse, pero las puertas le pillan el brazo. Las puertas vuelven a abrirse y el conductor le regaña por su actitud y por no haber entrado cuando tendría que haberlo hecho. El bebé de antes comienza a reír, y Máximo a modo de venganza le hace el mismo juego de expresiones, consiguiendo que el bebé llore con más fuerza.
Ante su actitud, el conductor acaba echando a Máximo del transporte y le recomienda que coja el siguiente autobús. Máximo baja del transporte y espera sentado hasta que venga el otro.
Cuando llega al lugar una gran carpa roja invade el lugar, en ella hay una larga cola con bailarinas, acróbatas musculosos y personas con personalidad extravagantes. Cuando la cola avanza Máximo pisa una mierda, y empieza a dar saltos tratando de despegársela de su zapato.
Máximo comienza a anotar todas sus ideas en una libreta. Después abre su maletín y mientras espera se come un bocadillo de tortilla de patata que está ya frío. Así, pasa el tiempo hasta que espera su turno. |
PERSONAJE | BIOGRAFÍA |
Federico | Es un viernes por la mañana, Federico se levanta a las 7 y su madre le prepara un zumo de naranja con una manzana roja para desayunar. Antes de ir a clases, Federico aprovecha para ver un documental de la Primera Guerra Mundial. Su padre Germán le ofrece llevarlo en su coche al colegio.
Es un día lluvioso, su padre le habla sobre pasar tiempo juntos para celebrar que este fin de semana hace 11 años. Primero le pregunta qué quiere hacer, Federico, ilusionado, le pide ir al zoo a ver los animales. Germán para en seco el coche antes de llegar al colegio y le comenta que le tiene una sorpresa preparada mejor. Federico se intenta acomodar y le sale un gesto de dolor al apoyar su trasero al completo en el asiento. Germán se preocupa y le dice que hoy a la noche, después de su sorpresa le dará crema hidratante si la necesita.
Federico entra a clases y en el descanso trata de planear su escapada. Se encuentra con la señora Marga, su profesora de inglés y ésta al ver al niño con el rostro pálido le pregunta sobre su estado. Federico le miente y le comenta que el nivel académico ha subido mucho. Marga le anima y le ofrece tutorías si necesitase ayuda.
Federico sale de la puerta de la entrada del colegio y justamente choca con uno de sus compañeros del grupo de fumadores de su clase, tirando el cigarro al suelo. Éste le pide 300 pesetas para pagarle el cigarro. Federico se niega y éste amenazante acaba empujándole y tirándole al suelo. Cuando cae, de su bolsillo salen dos de sus peluches y el resto de los compañeros se ríe de Federico. Justo antes de que empezaran a pegarle aparece Marga quien para la pelea mediante un grito.
El director llama al padre de Federico y los tres se reúnen. El director le explica que han tomado la decisión de expulsar al abusón que ha hecho que Federico tenga un moretón en la frente. Germán exige saber quién ha sido el causante del mal de su hijo, incluso hace alusión a matarlo si fuera necesario para que no volviera a ocurrir. El director intenta calmarlo, pero al final Germán se lleva a Federico a casa, quien no quiere irse con él.
Germán en el coche le da una bofetada a Federico, quien empieza a derramar lágrimas. Su padre le da un discurso sobre la necesidad de convertirse en un hombre y sobre la capacidad de toma de decisiones, aunque puedan resultar difíciles. En ese momento Federico se voltea y saca sus dos peluches a los que abrazo mientras se tapa el rostro.
Germán arranca el coche, le quita los dos peluches y los tira por la ventanilla. Los peluches acaban aplastados por la rueda del coche. Federico con la mirada perdida mira hacia su padre.
Cuando llegan a casa, su madre, Olga no está. Su padre empieza a preparar el baño y llama a su hijo a quien enjabona con extremo cuidado y mimo. Después de la ducha saca la crema hidratante, Federico se aprieta con la toalla el cuerpo, pero su padre le echa la crema en el moretón y después le da un beso en la frente.
Federico se encierra en el cuarto y escribe un email urgente a su profesora Marga para que vaya a su piso en el que le pone la localización y le pide que intente recuperar dos peluches de la carretera al lado de la parada de autobús del colegio.
Germán pone música de los Rolling Stones en el casete y empieza a tocarle a la puerta a Federico. Federico no contesta y su padre entra a su habitación. No hay nadie. Su padre lo busca por la habitación y lo encuentra dentro del armario con una linterna en su mano, leyendo un libro: Rebelión en la granja de George Orwell.
Su padre le obliga a desvestirse y éste no le hace caso. Germán le pega una bofetada y consigue neutralizarlo. Federico no siente fuerzas para gritar y su padre lo acaba desvistiendo. De repente suena el timbre y Germán le ordena vestirse. Es la señora Marga que saluda con agrado a Germán y le pregunta sobre el estado de Federico.
Marga, acompañada de Germán, entra en la habitación de Federico y descubre una atmósfera recargada. Marga le devuelve sus peluches y le ofrece a Germán una tarifa de clases para ayudar a su hijo. Germán, enfadado le pide que no necesita su ayuda, le dice que él puede ayudarle y que no necesita de ayuda externa.
Llega Olga a casa y al descubrir la idea de Marga le parece una buena idea para mejorar la calidad educativa de su hijo. Ambas dialogan precio y horario y tras un café Marga se despide de Federico, con quien empezará a darle tutorías al comienzo de la siguiente semana. Mientras tanto, Federico está tumbado en su cama, abrazado a sus dos peluches, mientras que su padre, le observa en momentos determinados.
A la noche, Olga prepara la cena, mientras Germán le ayuda a poner la mesa. Ambos llevan la comida al salón. Olga sube al trastero a poner la lavadora y Germán enciende el televisor para poner el fútbol.
En ese momento, Federico entra en la cocina, con sus dos peluches cogidos de una mano y coge el cuchillo más grande que lo esconde entre sus peluches. El niño le corta la mano a su padre, éste empieza a gritar y Federico mientras apuñala el rostro de su padre le da una charla sobre lo qué es ser un hombre y que no debería llorar por ello.
Cuando Olga vuelve a entrar por la puerta de casa, Federico la espera detrás de la puerta y justo cuando descubre a su marido muerto en el salón, Federico la apuñala 5 veces por la espalda hasta que cae muerta.
Federico asustado tira el cuchillo al suelo y coge sus dos peluches con los que se tumba en la cama y abraza con fuerza mientras se canta a sí mismo el Cumpleaños feliz. |
PERSONAJE | BIOGRAFÍA |
Axel | Son las 4 de la madrugada, Axel está dentro de una trinchera con una máscara de gas puesta. A su lado hay compañeros muertos llenos de quemaduras por todo el cuerpo, hay algunos a los que ni siquiera es capaz de reconocer. Al otro lado, se escucha el sonido de una ametralladora que se entrecorta con los relinchos de caballos. El ruido es lo que mantiene a Axel despierto.
La oscuridad y la polvareda que hay en el ambiente le imposibilitan poder ver más allá de unos pocos metros. Por experiencia Axel cree que actualmente se encuentra en la Primera Guerra Mundial. Se mantiene atrincherado en el suelo cubierto de lodo por todo el cuerpo.
Sin embargo, el sueño va pudiendo con él y cuando vuelve a abrir los ojos se despierta en una nueva guerra. Ahora se encuentra en la guerra de Vietnam, en la que se escuchan los disparos de los proyectiles de los tanques. Hay soldados corriendo de un lado a otro. Algunos, asustados se esconden y evitan ser vistos por los propios miembros de su equipo.
Axel se queda petrificado hasta que una granada le hace moverse del lugar en el que estaba. Se esconde detrás de un árbol en la que su mano se queda pegada a la sabia del tronco. En ese instante, comienza a reflexionar en cómo ha acabado en esa guerra. Sabe que es una guerra totalmente diferente, pero comienza a anotar ideas que le vienen. Así, se va dando cuenta de que cada guerra es la misma. Todas si bien son diferentes tienen una misma cosa en común: la ausencia de paz.
Le suenan las tripas y del dolor tiene que apretarse el estómago con las manos. Por el lugar no ve nada, más que soldados caídos. Entre los cuerpos inertes encuentra uno que está asfixiado, al que cada vez le cuesta más respirar. Axel lo dispara sin mirarle a la cara y cuando deja de escucharlo respirar, se acerca a él. Saca de su mochila un cuchillo y comienza a cortarle trozos de carne de las partes del cuerpo que están intactas. Axel muerde la carne.
Axel apoya su cabeza en el árbol y cuando vuelve a dormirse al rato se despierta en el bombardeo de Gernika, ve cómo una oleada de aviones que vuelan en formación triangular comienzan a bombardear. Axel procura luchar, pero le es imposible hacer nada. Vuelve a cerrar los ojos intentando salir del colapso en el que está, en el que en cualquier momento una bomba puede acabar con él.
Despierta en Grecia, en la batalla naval de Lepanto, a lo lejos puede ver como los barcos del Imperio Otomano intentan destruir el suyo. Escucha tres disparos de arcabuz, en el que uno de ellos daña la mano izquierda de Cervantes. Axel al darse cuenta de que un otomano lo amenaza con una espada cierra los ojos y cae en un profundo sueño.
Despierta en pleno contexto de la Segunda Guerra Mundial, se encuentra en el césped junto a más compañeros vivos. Esto le alegra y toma un respiro, hasta que en el centro ve a un militar apuntando con un bazooka al lado contiguo.
Axel lucha con toda su valentía y junto a su equipo con una ametralladora en la mano se enfrentan al otro bando. Hasta que decide parar esta especie de absurdo, con el uso de una bandera blanca, que como en el mito de Sísifo parece obligado a seguir un eterno castigo. El otro bando le dispara y cae herido, hasta que en el suelo consigue dormirse y volver a aparecer en otro momento.
Aunque ha cambiado de época la herida y el dolor se mantiene en él. Axel comprende que es imposible salir de esa situación y lucha con todas sus fuerzas, disparando sin ton ni son. |
PERSONAJE | BIOGRAFÍA |
Edipa | Edipa está tumbada, bostezando en su cama hecha de algodón de azúcar rosa. Se acomoda y da varias vueltas en ella. Su caballo alado, Layo, le lame los cabellos rubios y se levanta de la cama. Se monta encima de Layo, y mágicamente hace aparecer una mesa con comida. Come unas tortitas con sirope de arce sin la necesidad de usar cubiertos hace que cada tortita levite hasta su boca. Saborea tranquilamente cada bocado, mientras una bandada de gorriones cantan de fondo.
Al rato le pide a Layo que le traiga su saco de cartas. En él almacena las cartas que le envían los humanos, en las que le expresan a la Diosa Edipa que sea benevolente y les dé la oportunidad de mejorarles la vida. Edipa con sus poderes resalta con color rosa aquellas cartas más trágicas, sin necesidad de leerlas puede percibirlas. Cuando lee las problemáticas del mundo humano empieza a actuar. Así, consigue acabar con la Cuarta Guerra Mundial, que estaba a punto de comenzar. También consigue elaborar una cura para el cáncer y que este sea tratado con los suficientes recursos médicos. Asimismo, salva al ser humano de un nuevo virus por el que habrían estado confinados durante décadas.
Edipa según pide aquello que quiere, nota que una de sus manos empieza a tambaleársele. Sus poderes se empiezan a descontrolar y crea un círculo de energía que se empieza a dispersar por todo el espacio. Las nubes de color rosa pasan a ser negras y aparece una tormenta junto a un huracán. El estruendo asusta a Layo, quien protege a Edipa de uno de los rayos que se dirigían hacia ella.
Edipa pierde el conocimiento y al levantarse encuentra a Layo completamente muerto. Edipa comienza a llorar y su furia crea otra tormenta mucho más peligrosa que la anterior. Así, descubre que no ha perdido sus poderes y que siguen acompañándola. Entiende que si quiere algo solo tiene que desearlo realmente. Tiene que llegar hasta sus mayores límites para conseguir aquello que ansía.
De esta manera, Edipa pide que Layo vuelva a la vida. Al rato este se levanta, pero de fondo se escuchan unas bombas. Ambos descubren que ha comenzado la Cuarta Guerra Mundial que antes Edipa había conseguido evitar. Ella pide que esta se acabe, y cuando se terminan de escuchar los estruendos de la guerra, el mundo de Edipa se desvanece y cae junto a Layo a la Tierra.
Ambos comienzan a entender que los poderes de Edipa se han alterado. Por cada cosa que pida para el mundo real hace que su mundo ficticio pierda algo. Edipa procura mantener la calma y piensa cómo recuperar sus poderes sin tener que elegir entre ambos mundos.
Tras un tiempo pensando llega a una conclusión, quiere dejar de un lado la idea de que existan dos mundos y decide conectar ambos en uno. Empieza a pedir las cosas que quiere en su nuevo mundo. Sin embargo, antes destruirá todo aquello que no sea de su agrado. Ahora tiene la capacidad de crear una utopía, una versión mejorada de ambos mundos en uno solo. Edipa comienza a pedir y a formar su propio universo. |
PERSONAJE | BIOGRAFÍA |
Zacarías | Zacarías se levanta a las siete de la mañana. Se prepara un café con leche que unta con galletas María. Se quita el pijama para ducharse, pero al ver la hora, se da cuenta de que tiene que salir con prisa hacia su trabajo.
Una vez en el coche mira la hora, le quedan 20 minutos para entrar y desde su casa tiene 15 minutos. Cuando entra en la autopista con calma, descubre que hay un atasco que le hace llegar más tarde de lo esperado. Al final llega a su puesto de trabajo con 30 minutos de retraso. Una vez llega, aprovecha para ir al baño, pero antes de entrar por la puerta su jefe lo para y le comenta sobre sus últimos retrasos. ZACARÍAS se intenta justificar, pero su jefe le recuerda que en 5 minutos tiene una reunión con unos proveedores que van a comprarles unas piezas para los camiones que estás produciendo.
Al hacer la reunión descubre que la mayoría apenas le escucha. Todos están más pendientes de sus móviles. Incluso a uno de ellos le suena un video trending topic de TikTok. Esto hace que Zacarías comience a concluir su charla y acabe antes de lo esperado.
A la hora de comer, al no haberse preparado un tupper con comida tiene que ir al bar más cercano que está a 15 minutos caminando. En su tránsito las propias máquinas de la empresa en la que trabajo no le dejan tomar un buen respiro.
Al llegar al bar descubre que está cerrado por obras y sin apenas tiempo, Zacarías se ve obligado a volver a su empresa. En el despacho ordena unos papeles donde encuentra fotos suyas de joven. Está en la playa con sus amigos en Canarias. Hará ya por lo menos 20 años de esas fotos. Aprovecha ese rato para llamar a viejos amigos. Ninguno le coge el teléfono. Alguno incluso le escribe preguntando si todo está bien, pero que ahora no puede coger ninguna llamada.
Zacarías baja al taller a supervisar cómo trabajan las personas de las que está a cargo. Ninguno de ellos cumple con la formación que él les brindó y esto agobia a Zacarías por la falta de productividad. Así, hace parar a todos y les enseña cómo debe realizarse la tarea. Al levantar una pieza pesada nota un dolor en la espalda que provoca que empiece a sentirse mareado.
Zacarías decide pedirse el día libre, aunque su jefe lo ha amenazado con descontarle todas las horas que ha faltado. De camino a casa encuentra un atasco mucho más largo que el primero. Al llegar, observa que Tobey, su perro de 15 años, se ha meado en el parqué. Rápidamente lo saca de casa y le da un paseo de apenas diez minutos para que el perro pueda hacer sus cosas.
Cuando limpia el suelo descubre que su casa está aún más sucia. Su habitación está llena de pelusas, en la parte superior de las paredes hay alguna tela de araña y el salón está lleno de restos de comida. Limpia la casa como puede hasta que consigue que parezca decente.
Mira la hora y observa que se ha saltado su hora de pilates. Aún y todo coge una mochila con una toalla y botella de agua y va al gimnasio. Todo está petado, cualquier máquina es difícil poder usarla. Cuando se sienta en una en la que puede entrenar la espalda, al hacer fuerza ve cómo uno de los agarres se cae y se rompe. Un técnico del gimnasio le llama la atención y le hace unas preguntas en una sala sobre el uso que le da al material del gimnasio.
Zacarías vuelve a casa, sin haber podido hacer apenas deporte, se sienta en el sofá y enciende la TV. Solo hay anuncios. Además de los programas de prensa rosa que odia. Justamente en una de las cadenas encuentra un anuncio que le cambia la forma de ver el mundo. El protagonista es un tío, soltero, y con un trabajo que no le gusta. Igual que él. Que acaba descubriendo la felicidad esperando a que está llame a su casa. Por primera vez, decide no hacer nada más allá de esperar. |
Una vez habiendo escrito toda la dramaturgia del proyecta a representar, se empezaron a crear el material en vídeo. El trabajo relacionado con la improvisación supone una primer paso al futuro desarrollo interpretativo del fragmento a representar.

TRABAJO DE IMPROVISACIÓN
Los siguientes vídeos representan la primera improvisación en la que aparecen todos los personajes. En base a lo trabajado a través de las biografías, los aspectos esenciales de los personajes y la propia dramaturgia. Además de haber estado transitado por ellos corporalmente, y haber sacado a los personajes en actividades diarias que hacía el creador. Este último trabajo hacía que se los llevara a las acciones más básicas que él hacía en su vida ordinaria, actividades como ir al gimnasio, hacerse la comida o limpiar eran algunas de las que se empezó a plantear cómo las llevarían a cabo.
En los siguientes vídeos, es la primera vez donde el actor junta a todos los personajes y empezó a elaborar material audiovisual más allá de lo practiado con anterioridad. El primer vídeo es una representación sin texto para ahondar en sus movimientos más primitivos. Quiero añadir que este vídeo ha sido el de prueba y en el que he podido guiarme más por mi intución y creatividad como creador escénico. Tengo que decir que he podido rescatar muchos aspectos interpretativos de este vídeo. El segundo, en cambio, sí que incorpora texto, pero tan solo con palabras, frases u onomatopeyas que usan habitualmente los personajes. Así, mediante este método puedo ir investigando en cómo el cuerpo y la voz transitan por mí sin que la una opaque a la otra. El último vídeo, grabado en la noche, tiene un tono más teatral, como si las luces que hubiera fueran focos de teatro, demostrando de esta manera, que el teatro está en todo lugar que cualquier espectador se pare a observar.
VÍDEO 1: IMPROVISACIÓN SIN TEXTO
VÍDEO 2: IMPROVISACIÓN CON TEXTO
VÍDEO 3: IMPROVISACIÓN CON TEXTO Y AMBIENTE NOCTURNO
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